Tiburcio Carías Andino nació en el barrio Los Dolores de Tegucigalpa, el 15 de marzo de 1876, sus padres fueron Calixto Carías Galindo y Sara Francisca Andino Rivera, bautizado en la Catedral de Tegucigalpa por el cura Yanuario Girón. Su educación primaria la obtuvo en la escuela de Mauricio White y, en 1893, se graduó de Bachiller en Filosofía en el Instituto Espíritu del Siglo, rectorado por el presbítero Antonio Ramón Vallejo.
Su hermano mayor, Marcos Carías Andino, seguidor del Doctor Policarpo Bonilla Vásquez, lo interesó en la política vernácula. Se inició en el Partido Liberal de Honduras y apoyó al Presidente Bonilla y a Terencio Sierra Romero. Fue opositor del General Manuel Bonilla Chirinos al momento de la escisión que llevó a la formación del Partido Nacional de Honduras.
Obtuvo el grado de Licenciado en Jurisprudencia a los 22 años de edad, el 20 de noviembre de 1898, en la Universidad Central de Honduras. El título de su Tesis de grado fue “El establecimiento de las máquinas ha mejorado la condición de los menesterosos”. Un año más tarde, el 30 de enero de 1899, se acreditó como abogado y notario.
Ejerce como Magistrado de la Corte Suprema de apelaciones a partir de 1900, en Tegucigalpa. En 1901 es nombrado Director de la escuela primaria de varones en esta misma ciudad, también ejerció la docencia, enseñó las asignaturas de álgebra, geometría y aritmética en el Instituto El Porvenir, cuyo director fue el historiador Esteban Guardiola. En Universidad Central de Honduras fue catedrático de Derecho Penal en la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas.
Sagaz y dotado de una tenaz personalidad, en 1892, cuando apenas contaba con 16 años, acompañó a don Calixto Carías Galindo, su padre, en la campaña militar contra el gobierno de Ponciano Leiva. En 1893, durante las luchas que derrocaron a Domingo Vásquez, formó parte del ejército liderado por el liberal Policarpo Bonilla. Más tarde formaría parte del grupo opositor al Gobierno de Terencio Sierra debido a que, bajo su mandato, el Congreso no reconoció el triunfo electoral de Manuel Bonilla Chirinos.
En 1903, participó de lleno en las luchas que derivaron en la derrota de Terencio Sierra, en las batallas del El Aceituno y Coray, Departamento de Valle. Esas victorias le granjearon el grado de coronel. Ese mismo año, a la edad de 29 años contrajo matrimonio con Elena Castillo Barahona, quien a partir de entonces fue su inseparable compañera y con quien procreó cinco hijos, de los que sobrevivieron cuatro: Tiburcio, Gonzalo, Visitación y Marta.
En 1904 Manuel Bonilla asumió el poder y disolvió el Congreso, Carías Andino pasó a formar parte de la oposición. Para entonces se unió a las huestes de Miguel Rafael Dávila, quien lideró la campaña militar en contra de Bonilla. Los liberales derrocaron ese gobierno en marzo de 1907 y Dávila se convirtió en el nuevo Presidente de la República.
Ganó el grado de General de Brigada por su firme participación en este conflicto político, en la Batalla de Lizapa, en donde lucha junto a las fuerzas liberales. Fue nombrado gobernador político y comandante de armas de Copán. En 1908 su poder se extiende cuando es nombrado comandante de armas de Cortés, con asiento en San Pedro Sula.
En ese año, se funda la Sociedad de Artesanos El Porvenir , quedando él en la presidencia . En 1912 esta sociedad pasa a llamarse Sociedad Copaneca de Obreros.
En 1910 asciende a General de División, después de defender la plaza de San Pedro Sula en contra una nueva invasión de Manuel Bonilla. Cuando Miguel R. Dávila es obligado a renunciar, en 1911, Carías Andino se vio obligado a exiliarse en El Salvador.
Regresa de su exilio en 1914, tras la muerte de Bonilla Chirinos en 1913, le sustituye en el cargo de Presidente de Honduras el nacionalista Francisco Bertrand Barahona. Se asienta en la comunidad de Zambrano, al norte de Tegucigalpa, en donde se dedicó a labores agrícolas en las tierras de su propiedad.
Entre 1914 y 1919 se mantuvo al margen de la política, sin embargo, cuando estalla la guerra civil ese año, siendo ya vocal del Comité Central del Partido Nacional Democrático y ejerciendo el cargo de editor del periódico El Demócrata, vocero de ese partido, cuya membresía provenía sustancialmente del Partido Liberal del Constitucional, fundado por Francisco Bertrand en 1916.
Tras la muerte de Alberto Membreño, en 1922, Carías Andino asume el liderazgo del Partido Nacional. Rodeado de los intelectuales más sobresalientes del Partido, entre ellos Paulino Valladares, se dedicó a organizar la maquinaria del Partido en la Tegucigalpa y otras ciudades del país. La unidades organizativas eran denominadas “Club” y a través de ellas organizaron a miles de ciudadanos por toda Honduras.
El rebautizado Partido Nacional representó las aspiraciones de toda una generación de hondureños que estaba harta de las guerras civiles que destruían la economía de la nación e impedían el buen ejercicio gubernamental, Carías Andino tuvo la suficiente sensibilidad política para interpretar esta utopía y estableció el orden y el progreso con mano dura.