En el occidente de Honduras, entre las altas cordilleras de Celaque y Opalaca, se extendía antes del descubrimiento, el territorio llamado Cerquín. En esa época los españoles trataban con crueldad a los indios, les quitaban sus posesiones y los hacían sus esclavos.
Era de origen Maya-Lenca, desde muy joven había dado muestras de gran valor sentía un amor entrañable por su raza, tierra, sus leyes y costumbres.
Cuando los españoles llegaron a Cerquin, el Indio Lempira estaba en guerra contra otros caciques vecinos. Pero comprendió que sus peores enemigos eran los soldados extranjeros, que habían venido a robar sus tierras y libertad. Hizo entonces un pacto de alianza con las tribus vecinas para proteger su territorio que actualmente llevan su nombre, «Departamento de Lempira».
Lempira luchó por defender a su pueblo de la esclavitud que los españoles querían imponerles, para no perder su libertad y costumbres. Este guerrero instó a su pueblo a luchar por defender sus ideales y no permitir ser humillados por los colonizadores y habiendo tantos bravos guerreros no se podián dar por conquistados. Los españoles al darse cuenta del levantamiento indígena de inmediato comenzaron a atacar, la guerra se prolongó por seis meses. Al darse cuenta que no podían vencer a Lempira, hurdieron un vil plan, basado en la traición enviando un soldado a Lempira con un mensaje de paz, mientras otro estaba oculto apuntándole con un arcabuz, Lempira cayó en la trampa ya que él era un hombre que no sabia de este tipo de artimañas; y así disparándole, el Cacique rodó por la sierra llevando consigo las esperanzas de liberación de nuestra raza. Pero su muerte no fue en vano, porque Lempira vive en el pueblo que indignado rechaza toda presencia extraña contraria a la Soberanía Nacional y de nuestra condición de hombres libres.
El 20 de julio se ha decretado DÍA DE LEMPIRA para que todos los niños de Honduras recuerden con reverencia al indio Heroico que supo morir en defensa de la libertad de su pueblo, también José Augusto Coello en el hermoso poema convertido en nuestro himno nacional hace mención inmortal en su tercera estrofa a este héroe indígena
«Era inútil que el indio tu amado
Se aprestara a la lucha con ira,
Porque envuelto en su sangre Lempira,
En la noche profunda se hundió;
Y de la épica hazaña, en memoria,
La leyenda tan sólo ha guardado
De un sepulcro el lugar ignorado
Y el severo perfil de un peñón.»
Fuente: http://www.honduraseducacional.com