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13 DE OCTUBRE DE 1991 EN EL MARCO DE LA SÉPTIMA PANDEMIA, GOASCORÁN, VALLE, REPORTA EL PRIMER CASO SOSPECHOSO DE CÓLERA, NO COMPROBADO LABORATORIALMENTE.

SÉPTIMA PANDEMIA (1961) Brotes esporádicos se dan en Luisiana y Alabama en el inicio de esta Pandemia en América. – El 29 de enero de 1991 la bacteria se hace presente en el litoral del Perú superando en solo cuatro meses los 200.000 casos con más de 1700 muertos.

El 24 de octubre de 1991, el Sr. Rubén Mendoza Flores, de La Laguna, Alianza Valle, es el primer caso hondureño comprobado como Colérico, teniendo como fuente de infección las contaminadas aguas del Río Goascorán. Con antelación al Gobierno del Lic. Rafael Leonardo Callejas – Romero, había ordenado tomar las medidas profilácticas y de control ante la inminencia de la patología que hacia estragos en Guatemala y El Salvador. – Desde entonces y hasta mayo de 1995 la casuística hondureña es: AÑO MUERTES

AÑO MUERTES
1991(Oct.-Dic) 17 4
1992 407 17
1993 4013 103
1994 5049 102
1995(Ene-Abr) 320 17
TOTAL 9806 243

Los Departamentos más afectados han sido Choluteca, Francisco Morazán y Cortés que juntos acumulan el 52% de la morbilidad en contra-posición a Intibucá, Colón y Ocotepeque que suman 71 enfermos en los tres y medio años que tiene el Cólera de ser nuestro indeseado huésped… y que va para largo.

Consideraciones finales:                                                                                                       

La ampliación de la red vial y de los servicios de salud permite en la actualidad atender con precisión y oportunidad a nuestros pacientes y recoger fidedignamente la casuística del país. – la administración de antibióticos, supera en gran medida el muy loable esfuerzo de los médicos del siglo xix. – hoy se da primordial importancia al tratamiento de la   deshidratación   dado   que   su   severidad desencadena la elevación de la mortalidad en ésta y otras diarreas. La falta de estructura sanitaria, así como el desinterés del hondureño por mejorar su conducta de higiene, es la mejor garantía para que el Vibrio cholerae se afinque en honduras por mucho tiempo.

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